martes, 24 de mayo de 2011

EXÁMENES EN EL COLEGIO DE PITILLAS

24 de mayo de 1.911, miércoles


Siento la más grata satisfacción al dar cuenta al periódico de su digna dirección de los exámenes que con brillantísimo resultado se han celebrado en los días 18 y 19, presididos por el muy preclaro hijo  de esta villa Excmo. Sr. Obispo de Vitoria, en el Colegio fundado a sus expensas y dirigido por las meritísimas Hijas de Jesús, que, a pesar de no ser conocidas hasta ahora en Navarra, han de despertar admiración en cuanto la provincia se percate de sus excepcionales dotes y método de instrucción.
Aplaudo con mis dos manos al ilustrísimo Prelado por su gran acierto en la elección de personal.
La mañana del 18 comenzaron los exámenes por los parvulitos, los cuales nos embelesaron oyéndoles contestar a las innumerables preguntas de Doctrina, Historia Sagrada, lectura, Aritmética, etcétera, etcétera, con una gracia y soltura que demostraban hallarse bien penetrados de las instrucciones que con una paciencia sin límites habían derramado gota a gota en sus tiernas inteligencias las Religiosas.
La tarde del mismo día tuvieron lugar los de la clase gratuita y en ellos admiramos progresos escolares que en poco más de un año han hecho aquellas niñas. ¡Bien, muy bien por las niñas buenas y aplicadas!
El día 19 lo consagramos todo a presenciar los de las alumnas del pensionado, cuyo programa de lo más interesante abarcaba las asignaturas de Religión y Moral, Historia Sagrada, Eclesiástica y de España, Doctrina, Gramática, escritura, desarrollando un tema, problemas de Matemáticas, Física, Historia natural, Fisiología e Higiene, Urbanidad, Geografía, Francés, solfeo y piano. Todas las alumnas cumplieron a maravilla su cometido contestando de concepto con gran precisión a las preguntas más difíciles y demostrando poseer una instrucción nada común. En la sección de francés parecíanos escuchar un grupo de francesitas que se expresaban con corrección.
Al terminar, el señor Obispo pronunció un breve pero sentidísimo discurso, manifestando su gran satisfacción al recoger los primeros frutos ya tan abundantes de este árbol plantado por él, que está llamado a darlos todavía más sabrosos en adelante. Terminó felicitando a las alumnas por su aplicación y a las Religiosas por su abnegación y celo, dándonos a todos su bendición pastoral.
A continuación pasamos al salón donde estaban expuestas las labores, y allí admiramos progresivamente desde el zurcido hasta el bordado primoroso, donde parece haberse entretenido manos de hadas.
Vaya nuestra gratitud eterna al ilustre Prelado que tanto se interesa por el bienestar de este pueblo que se honra llamándole su hijo predilecto, y nuestra felicitación sincera para las religiosas y alumnas.
22 Mayo 1911

Diario de Navarra. Nº 2.167

No hay comentarios:

Publicar un comentario